La relación entre un cliente y un producto comienza en cómo se ve, en este caso hablamos del packaging y su etiquetado. Una etiqueta debe de reflejar una relación muy fuerte con la marca, esto debido que el mercado esta en constante cambio y el verdadero valor del producto radica desde su apariencia, el proceso de compra, hasta su función, por ello el tener un empaque con un etiquetado único hace que el consumidor recuerde a la marca por sus características principales (color, tipografía, etc.)
Tener una gama de colores definidos y una tipografía establecida es de gran ayuda para poder generar una imagen de marca más fuerte, y con ella desarrollar un branding estable.
De tienda física a e-commerce
A la par del cambio en el mercado de producto a experiencia, también se suma la manera de comprar el producto al branding de este, por ejemplo tenemos a Amazon, quien tiene un empaquetado muy neutro pero todos lo diferencian por su etiquetado negro que sella el empaque, este etiquetado debe de soportar diversas temperaturas por su forma de envío.