En la industria, se utilizan muchas etiquetas que son personalizadas por el cliente final y no por el convertidor. Son comunes aquellas que sirven para identificar diferentes productos con propósitos como la señalización de un precio o el control de inventarios.
Dicha personalización generalmente es muy simple y a una tinta, impresa en una impresora térmica (Zebra es la marca más común).
Estas etiquetas son impresas en papel térmico o de transferencia térmica los cuales tienen las siguientes características:
Papel Térmico: Se imprime con un cabezal térmico puesto que reacciona con el calor oscureciéndose. No se necesita tinta para imprimir. Tiene el defecto de borrarse u oscurecerse con el tiempo y el calor.
Papel de Transferencia Térmica: Es un papel tratado para que mediante el calor, la tinta sea transferida de un ribbon (imagen) al papel. El costo de impresión es más alto pero tiene mayor calidad y durabilidad.